jueves, 14 de julio de 2016

KRAVEN EL CAZADOR

Fuma mucho y retiene el humo para expulsarlo por la boca lentamente, sin cambiar su expresión salvaje. Arquea las cejas y frunce el ceño para dar a entender que esta noche lo va a dar todo. Lo sugiere a su manera, desde la barra exterior de un local de copas, de pie, ligeramente acodado. Es un grotesco chico Martini; el único que lleva un chaleco de cazador, con el cuello levantado. Tensa sus bíceps y pone morritos mientras remueve su gin-tonic con el dedo índice; luego lo chupa libidinosamente. Al final, sonríe a una de las presas que no puede dejar de mirarlo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario