lunes, 7 de diciembre de 2015

EL NAVEGANTE

Ella escuchaba todas las recomendaciones de sus allegados cuando le sugerían a bien que debía quitárselo de la cabeza, que ese amor no le convenía y solo le traería desasosiego. Asentía con la cabeza sus advertencias porque, en el fondo, también intuía en esa impulsiva aventura una situación complicada. Para tranquilizarlos les daba la razón, les decía convencida que trataría de olvidarlo y seguiría con su vida como hasta ahora. Pero cuando ese irrefrenable anhelo le trepaba por la espalda y se clavaba en su pensamiento, le ahogaba la presión y subía presurosa a la superficie para volver a verlo. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario